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No le estoy dando a este blog la continuidad que había previsto en un principio... y es que al fin y al cabo el día a día me quema.

Pero hoy volviendo a casa (dos horas más tarde de lo previsto porque como pasa con todas las revistas del mundo nos ha pillado el toro para el cierre de "La Nevera del Estu" que volverá a salir en formato periódico contra el Regal FCB), me he acordado de una historia que no sé si es cierta o no porque me ha llegado por vía oral en váyase usted a saber qué ocasión... porque hablar de basket y frikadas en mi círculo de amigos viene a ser de lo más normal.

Y aunque Gigantes diga que es Bárcenas, es Jiménez

Remontémonos al año 1999, en plenos fastos del centenario de la fundación del club de fútbol con cuya sección de baloncesto Estudiantes se enfrenta este domingo, esto es, el Fútbol Club Barcelona. Un Barça que no recuerdo qué cojones haría en fútbol, pero en basket sí me acuerdo de sobra de uno de los títulos que ganó: la Copa Korac. Vamos, porque nos remontó una eliminatoria que teníamos ganadísima follándonos por 27 puntos... pero esa es otra historia para otro día.

En esos grandes fastos del "centenari" ("pajas a diari", que cantábamos en las gradas del Palau aquella semana santa de 1999) se cumplía otro aniversario de fundación de un club menos redondo, pero claro está, infinítamente más cachondo: el Club Joventut de Badalona cumplía 69 años.

Ese es el dato. Lo que me cuentan y ya no lo tengo claro, es que se curraron hasta merchandising. Una Penya que por entonces estaba en una travesía en el desierto tras los grandes éxitos que casi la hunden por el esfuerzo de competir contra los futboleros ("cuando fuimos los mejores", ¿no?) se permitía el lujo de una vez más desafiar el totalitarismo culé, pletórico con su exitoso centenario, celebrando semejante cifra.

Si es cierto que hicieron esto, y espero confirmación, me parece una absoluta genialidad. Una vacilada de las que sólo clubes así, de los de Asterix y Obélix contra el imperio, se pueden marcar. Y de darle una medalla a quien se le hubiera ocurrido.

2009
... y 10 años después, otra bombilla se encendió por Badalona, para aprovechar otra situación en principo no favorecía a la Penya como la anunciada salida de Ricky Rubio para hacer esa joya del "marketing" deportivo como ha sido la campaña de "EL QUE FA LA PENYA SÍ QUE ÉS INCREÏBLE". Otra absoluta vacilada en todos los morros. Otra incorrección política, sacada además en el momento justo. Con detallitos como la manzana que se come el crío del final.